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17 March 2013

Primeras Impresiones del Rescate de Chipre

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Chipre es el cuarto país de la Unión Europea que ha tenido que pedir un rescate económico (el quinto si contamos el semi-rescate de la banca Española). A diferencia de Grecia, Portugal e Irlanda, el rescate de Chipre (cuyo monto total será de 10.000 millones de euros provenientes de Europa) viene acompañado de la expropiación inmediata de una parte de los depósitos bancarios: los depositantes que tienen más de 100.000 euros en el banco van a perder el 9,9% de sus ahorros y los que tengan menos de 100.000 van a pagar el 6,75%(*). Esta medida afecta a todos los depositantes, desde empresas hasta jubilados pasando por extranjeros residentes o no en la isla. La justificación oficial de esta confiscación de depósitos es que uno de los grandes problemas de Chipre está en su sistema bancario sobredimensionado que sufrió un duro golpe el año pasado cuando se hizo la quita de deuda soberana griega de la que, al parecer, tenía una cantidad desproporcionada. Como el "problema" está en el sistema bancario, dicen, es "normal" que se ponga un "impuesto" al sistema bancario(**). Pero claro, que "el sistema bancario" el que tenga que pagar los gastos del rescate no quiere decir que deban ser los depositantes y no los acreedores juniors o séniors por lo que la decisión sigue siendo desconcertante.

Por mucho que la Troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) lo califiquen de “impuesto especial sobre los depósitos”, la decisión de confiscar una parte de los depósitos se parece más a un atraco que a un impuesto: cuando el estado introduce un impuesto sobre la actividad X, los ciudadanos pueden reaccionar llevando a cabo menos actividad X. Por ejemplo, si el estado aumenta el IVA, los vendedores lo incorporan a los precios y lo consumidores deciden si siguen comprando las mismas cantidades o prefieren ahorrar. Del mismo modo, si el estado introdujera un impuesto sobre los depósitos bancarios, los depositantes decidirían si retiran el dinero del banco o si lo mantienen a cambio de perder los servicios que da el banco y pagan el impuesto. Esto no es lo que ha pasado en Chipre este fin de semana. En Chipre se ha confiscado, por sorpresa, con nocturnidad (literalmente la medida se aprobó a altas horas de la mañana del sábado) y alevosía sin dejar opción a los ciudadanos.

¡Si! Es cierto que el sistema bancario chipriota está inundado con el dinero de oligarcas rusos cuyo origen (el del dinero) es más o menos sospechoso, más o menos ilegal. Y entiendo el argumento (hecho por el Fondo Monetario Internacional) de que si se expropia un porcentaje de los depósitos de más de 100.000 euros, una parte del rescate lo van a pagar los oligarcas rusos y no el contribuyente chipriota o europeo y eso es atractivo políticamente porqué el rescate tiene que ser aprobado en los países que van a acabar poniendo el dinero (en particular, el paquete del rescate va a tener que ser aprobado por los cada día más reticentes parlamentos alemán, finlandés y holandés). Pero dejando de lado si es eficiente tratar el problema del dinero negro ruso de esta manera, la decisión de la UE ha ido mucho más allà y ha confiscado el 6,75% de los depósitos de menos de 100.000 euros, mayoritariamente en manos de los ciudadanos chipriotas de a pie por lo que estos acaban pringando porque van a tener que devolver los 10.000 millones del rescate a través de los recortes que les van a caer a partir de mañana y, ADEMÁS, han perdido el 6,75% de los ahorros que tenían en sus depósitos bancarios. Esto es una muy mala noticia por muchas razones.

Primero, hasta ahora los depositantes de toda la UE dormían tranquillos porque las autoridades económicas SIEMPRE habían puesto la protección de los depositantes como máxima prioridad: cuando un banco tenía problemas, los primeros en perder dinero eran los accionistas, después los propietarios de las preferentes y después los otros acreedores. Los depositantes con menos de 100.000 euros estaban a salvo gracias, entre otras cosas, a los Fondos de Garantía de Depósitos. Eso ya no es verdad. A partir de hoy, los depositantes de cualquier país de la UE ya no pueden dormir tranquilos durante los fines de semana porque en cualquier momento se pueden despertar y ver que el gobierno les ha expropiado una parte importante de sus ahorros (entre semana pueden dormir tranquilos porque este tipo de atracos tiende a suceder en fines de semana y, en particular, fines de semana largos -el Lunes es fiesta en Chipre- para dar tiempo a las autoridades a robar el dinero de los ciudadanos mientras los bancos están cerrados).(***) Ya sé que las autoridades Europeas nos dirán mil veces que Chipre es distinto y que no se puede generalizar. Pero mucho me temo que con palabras no habrá suficiente para convencer a los ciudadanos atemorizados. Tendrán que crear algún mecanismo que genere confianza y, de momento, este mecanismo no existe.

Segundo, además de ineficiente, la decisión es profundamente injusta: los pensionistas y los parados chipriotas pierdan el 6,75% de sus ahorros (unos ahorros que figuraba que estaban asegurados por un fondo de garantía de depósitos) mientras que los fondos de inversión poseedores de bonos de esos bancos no pierdan ni un solo euro.

Tercero, la medida puede resucitar el contagio en Europa. ¿Recuerdan que durante la primavera del año pasado, países como España e Italia vivieron un pánico que llevó a los depositantes a sacar miles de millones de euros de los bancos porque tenían miedo de que en Grecia hubiera un corralito previo a la salida del euro? Ese miedo a perder su dinero en algún tipo de corralito como el argentino de 2000-2001 causó estragos en las bancas española e italiana y amenazó con poner a esas dos economías al borde del abismo. Recuerden también que ese miedo desapareció cuando Draghi anunció en Julio de 2012 que el Banco Central Europeo imprimiría el dinero que hiciera falta para garantizar la supervivencia del euro y se nos juró una y mil veces que los episodios de corralitos nunca sucederían en Europa por lo que los depositantes europeos no tenían por qué tener miedo. Por más que los ministros nos digan que "Chipre es un caso especial por el gran tamaño de su sistema bancario", se ha abierto la puerta de las confiscaciones de despósitos en la UE. Los contagios y los pánicos bancarios pueden volver a España e Italia y eso puede volver a poner a esas dos economías al borde del colapso financiero.

Cuarto, todo esto pasa en un momento que los reguladores están apretando las clavijas a los bancos y les están obligando a recapitalizarse. Este proceso de recapitalización bancaria conlleva intentar captar más depósitos. El nuevo riesgo de expropiación de esos depósitos no hará más que dificultar la tarea de los bancos. La consecuencia es que el saneamiento del sistema financiero español va a tardar mucho más y la salida de la crisis se retrasa.

Quinto, del mismo modo que la UE le ha dicho a los ciudadanos de toda la Eurozona que pueden perder una parte de sus depósitos en cualquier momento, también les ha dicho a los ministros de hacienda que este tipo de medidas son aceptables en Europa. De este modo, ha abierto las puertas a los ministros locos, sin escrúpulos a la hora de incumplir programas electorales y sedientos de recaudación para cumplir unos objetivos de déficit, a que cometan el mismo tipo de confiscaciones se han cometido en Chipre: ya sé que las autoridades españolas se han apresurado a decir que eso no ocurrirá en España... pero con el currículum de mentiras acumuladas y promesas incumplidas que tienen los ministros de hacienda españoles, solo faltaba que la UE le diera ideas a Montoro sobre cómo extraer más dinero del bolsillo de los españoles! A partir de ahora, que nadie descarte que don Cristóbal se levante un día y nos diga que expropia nuestros depósitos ya que, como dijo cuando subió el IVA y el IRPF, "no había otro remedio”.

Sexto, el rescate de Chipre demuestra que la Unión Europea no cree en la Unión Europea. Hace muy pocos meses que la UE creó el Mecanismo Europeo de Estabilidad  (“European Stability Mechanism”) precisamente para poder financiar este tipo de rescates. Y, si bien es cierto que los “Memorandums of Understanding” que los países tenían que firmar para acceder a esos fondos comportaban recortes del gasto público, aumentos impositivos y compromisos de reformas de todo tipo, nunca hasta hoy se había obligado a financiar una parte del rescate con el dinero de los depositantes.

Séptimo, las expropiaciones de Chipre aumentan notablemente el coste que para un país tiene el ser rescatado. Hasta ahora los países con problemas luchaban con uñas y dientes para evitar tener que pedir el rescate, cosa que retrasaba en exceso la toma de medidas y agravaba la situación. La razón es que los rescatadores obligaban a los rescatados a tomar medidas impopulares que normalmente acababan desbancando al gobierno de turno. A partir de ahora, los gobiernos saben que como parte del rescate la UE puede obligarles a tomar la más impopular de las medidas: la confiscación de los depósitos. Y eso va a retrasar todavía más la decisión de pedir el rescate y, en consecuencia, va a agravar la situación de los países en crisis.

Y finalmente, el punto más importante: se ha sentado un precedente para los rescates dentro de la UE (de hecho, para todo el mundo ya que el FMI está involucrado en el rescate de Chipre). De ahora en adelante, todos los ciudadanos y todas las empresas de todos los países que se rumoree que van a ser rescatados van a tener en mente que si dejan sus ahorros en el banco existe la posibilidad de que pierdan una parte importante. Por lo tanto a la que aparezcan rumores de rescate, los ciudadanos van a correr al banco a sacar su dinero y las catástrofes financieras se van a multiplicar. Este punto es importante para el caso de España, un país del que hace meses se rumorea que va a pedir el rescate. Cuando vuelvan los rumores, si es que vuelven, que se preparen los bancos para los pánicos generalizados.

Resumiendo, se mire como se mire, el rescate de Chipre no solo es una mala idea sino que es una mala noticia. Para los pobres chipriotas que han perdido una parte de sus ahorros y para el resto de los ciudadanos de Europa.

 

 

 

(*) Es verdad que dicen las autoridades que, a cambio, se les va a compensar con acciones de esos mismos bancos, acciones que van a caer en picado en el mismo momento en que los depositantes, que no quieren acciones sino depósitos, corran a venderlas. Con compensación o no, la realidad es que con esta medida se estima que el gobierno chipriota va a conseguir entre 5.000 y 7.000 millones de euros: si esa es la cantidad que el gobierno espera recaudar, esta es la cantidad que se le va a confiscar a los depositantes, por más que lo intenten edulcorar con acciones devaluadas).

(**) Aviso para navegantes: uno de los grandes problemas de la economía España (si dejamos de lado la incompetencia de sus sucesivos gobiernos y el deterioro institucional) también es el sistema bancario.

(***) Aviso para navegantes 2: se acerca la Semana Santa.

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INTRODUCTORY NOTE

Starting January 30, 2012, I decided to put the random (economic) thoughts that I was posting on Facebook, in a blog. In this site you will be able to read all Facebook notes going back to 2008, (without my Friend’s comments, unfortunately), but we will only maintain the new thoughts. If you want to check out the old comments, they are still posted on Facebook. If you want to comment on them, you have two options (1) Become a Facebook Subscriber. Since all the posts will also appear in Facebook, you will be able to comment there. (2) Comment on Twitter, as each post will also be announced in Twitter.

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